martes, 26 de mayo de 2015

Maldito Diego Ojeda...

Sé que hace días que no escribo,
o mejor "que no os escribo"
porque ha sido demasiado para mi,
y toda la culpa es de Diego Ojeda,
igual fue primero de Salem,
un poco siempre de Martínez,
algún salpicón de Neruda,
mía,
suya,
sobretodo suya,
sobretodo mía,
sobretodo de ese tal Ojeda;
tanto hablar de desayunos completos,
de ser feliz bajo la lluvia,
de canciones de guitarra,
de dragones en las manos,
de poner bombas
y provocarse explosiones,
tanto hablar de amor,
tanto hablar de revolución.

Pero como nos gusta
pensar que ha sido otro
quien tiene toda la culpa.

Bueno, nada más por hoy, disfrutadlo y compartidlo. Seguid con vuestras cómodas vidas.