domingo, 27 de octubre de 2013

Aquel desorden deseado...

Ni los despistes por las sumas
ni las discusiones por tonterías
ni días malos o malísimos
ni desconfianzas ni puntos suspensivos,
sólo el tiempo tendrá una ligera idea
de qué será aquello que nos espera
y es de los pocos que nunca me falla.
Ahora yo intento trabajarme la sonrisa,
coger con optimismo el día,
desayunar y leer "good morning"
más que suficiente para despertar
y salir de casa con energías renovadas,
vivir mi vida como si fuera la única
y vivir mi vida como si fuera parte de la tuya.
Dame un poco de tu boca
y yo te lo repongo,
me estas dando un poco de tu vida
que guardaré como un tesoro
y no soy de los que olvidan,
recuerdos siempre agradables
aunque se bañen de melancolía.
Como el negro sin el blanco,
como el bien sin el mal,
mi vida sin el contraste que me diste
ahora me sabría mal,
es que llegaste y patas arriba
y así es como me gustaba que fuera mi vida.

Bueno, nada más por hoy, disfrutadlo y compartidlo. Seguid con vuestras cómodas vidas.

miércoles, 16 de octubre de 2013

Nº8...

Soy vecino del dinero,
de las desgracias de lo ajeno,
de curanderos y curanderos
y amantes cambiados por perros;
sabiendo todos y cada uno
de sus momentos de intimidad,
oyendo como discuten a gritos
camuflados por la gran ciudad
y yo, como siempre, desorientado,
ando tan y tan perdido
que quizás hasta encontrado.
Mi pequeño mundo
sigue siendo lo único entero,
es mi aura permanente
y ahí es todo como quiero
porque, qué más da la realidad,
si al fin y al cabo es tan subjetiva,
aunque no lo quieran valorar
y así dejar de pensar
en los negocios de la puerta,
en el inglés por el patio,
y demás vecinos que nos rodean,
yo sólo confío en ellos,
en que vivan por algo bueno
y una sonrisa en el ascensor,
un saludo en la puerta,
actos de amabilidad en serie
aunque ellos no se lo crean.

Bueno, nada más por hoy, disfrutadlo y compartidlo. Seguid con vuestras cómodas vidas.

lunes, 14 de octubre de 2013

Jueves...

De mis mayores indecisiones
mis peores momentos,
no es entre malo o bueno,
o entre malo y malo
o entre bueno y bueno
y pobre de mi, pensando a proporción,
pensando que puedo con todo
aunque resulte imposible
en la mayoría de los casos.
Y no se sí nací,
pero soy un gran exponente,
la indecisión cada segundo me puede,
choques entre trenes
que descarrilan en mi tranquilidad
convirtiéndola en un dos trincheras
y en medio yo, el juez de guerra,
y mientras miro el conflicto
sin gran cosa que hacer,
mi sensibilidad huye desolada
por no saber hacia donde continuar.
Suerte los que viven por impulso,
suerte los que no piensan nada,
suerte en este tipo de situaciones
en las que mi cabeza se colapsa
y aparece un peso
a cada lado del labio,
es la carga que cargo
el castigo nombrado
por no saber elegir nunca
al llegar el momento adecuado.

Bueno, nada más por hoy, disfrutadlo y compartidlo. Seguid con vuestras cómodas vidas.

jueves, 10 de octubre de 2013

4 de 4... (retrasado)

Compañero, lo siento
pero ando muy liado
vivo ahora en un mundo diferente
y ya no se que me aguardará la suerte,
tanta es mi abstracción
que ni versos escribo
salen un poco forzados
y ese no era mi estilo,
pero aquí está
4 días más tarde
la entrada que completa la serie,
perdón por si no gusta
o quizás ni lo leas,
pero llevo ya una semana
dandole vueltas a esta idea,
pero sin más dilación
aquí tienes tu regalo.

"-*DING DING DING DING* ¡EL BINGO ES CORRECTO! ¡TENEMOS UN GANADOR! Los números son el 203, el 210, el 510 y el 2101, el ganador es el número 95.
- Qué bien, pensaba que nunca me saldría ese último número.
-¿Cuál era ese último número?
- El 510.
- Ah, bonito número, pero no por ser el último debes tenerle rencor por mantenerte a la espera, es un número especial.
-¿Especial?
-Exacto, es un número que expresa una gran gratitud y deseos de un destino prometedor, sobretodo al empezar nuevos caminos, es un punto de inflexión en la vida donde la libertad cobra otro sentido y muestra una madurez ya superior; es un número que marca la unión entre gente, unos nuevos, otros viejos, pero unión al fin y al cabo así que, por favor, no se te ocurra despreciar a este número tan especial.
-No lo tenía pensado, pero sabiendo esto, me niego rotundamente a despreciarlo, a este ni a cualquiera de los otros números."

Bueno, nada más por hoy, disfrutadlo y compartidlo. Seguid con vuestras cómodas vidas.

miércoles, 2 de octubre de 2013

3 de 4...

No recuerdo mi primer cumpleaños
ni el segundo ni el tercero ni el cuarto
simplemente tengo recuerdos vagos;
recuerdo en algún momento
cuando todos eramos un rebaño sin pastor
yo debajo de la mesa
explosión tras explosión
y descubrir ahora los amigos de entonces;
recuerdo en la piscina de bolas
ya un tanto más mayor
cumpleaños compartido en un principio
pero era, y es, limitada mi lista de amigos;
recuerdo a los 15 una fiesta sorpresa
que mi pilló con los pantalones abajo,
cena con amigos e invitados
y luego juegos, risas e irnos cuando molestábamos
a un concierto de las viejas glorias;
recuerdo una mañana sin poder dormir
sacando ya mis primeros dotes de bohemio,
un texto reflexivo sobre el crecimiento
y sobre la incomprensible alegría del momento;
recuerdo las mañanas de colegio
cuando tenía mis regalos en lugares secretos
y la ilusión por no saber en que rincón
abriría y se me iluminarían los ojos;
recuerdo la pequeña repostería
cada año acumulando más velas
hasta conseguir estructuras imposibles
sobre una sola magdalena;
recuerdo las mañanas de torrijas,
mi madre desde muy pronto en la cocina,
corta, reboza y fríe, la rutina
bien aprendida para que también la disfrute;
recuerdo cenas que no llegaron a ser cenas,
invitaciones que se quedaron en intención,
noches que no llegaron a ser fiesta
e invitaciones que no pasan de lo banal.
A pesar de lo que pueda parecer
guardo buenos recuerdos de estos días
a pesar de los que quieren quedar bien
ves a gente que de verdad te anima,
lejos del alcohol y lo material
encuentro un significado más amplio;
y ahora me encuentro en el punto "deseado",
donde todos los jóvenes querrían estar,
poder tener edad para hacer lo que desean
y yo me encuentro desorientado
porque ni entiendo sus disparates ni sus normas,
simplemente un año más,
simplemente me veo más cerca de las dos décadas,
simplemente podré tener edad para ir donde sea
y poder adquirir la cerveza que quiera
aunque hasta ahora esa era mi realidad,
ventajas de la altura y del saber estar,
seré el mismo de siempre, o espero,
por años que pasen desde el cero,
sólo evolucionar, ir hacia delante
pero la edad no es lo que me lo marca
teniendo con mis diecisiete más vivencias
que toda una manada entera,
teniendo con mis diecisiete más experiencias
por las marcas de bara en mi cabeza
por lo que el tiempo sólo es
un factor que les sirve de evolución
a aquellos seres que se limitan al reloj
y no ven que la vida es mucho más que el movimiento
de dos agujas perfectamente programadas,
algo más que la simple fecha de mis 6575 días
pero el poder y los que lo sustentan
quieren vivir ateniéndose a esas reglas
mientras yo me mentalizo para mi decimoctavo otoño,
aquella estación donde todo lo inservible cae
y se quedan sólo los cimientos,
lo que produce el sustento para seguir,
mantenerse erguido a pesar de vivir,
suponiendo que a partir de este punto
tienes los suficientes para subsistir
pero el que era un inconsciente entonces
lo seguir siendo sólo que conduciendo un coche.
Parecerá que no pero estoy alegre,
alegre por los míos, por la gente que me quiere,
por lo que lo consideran un días muy especial
y hacen que se contagie y que de verdad lo sea,
no espero un cambio brusco ni un giro inesperado,
espero seguir mi camino, seguir andando,
no evoluciono por fechas sino por experiencias
y prefiero mil veces una aventura
a vivir eternamente en los treinta.

Bueno, nada más por hoy, disfrutadlo y compartidlo. Seguid con vuestras cómodas vidas.