Imaginémonos un mundo, un mundo paralelo en el que el tiempo pase más despacio y lo que aquí son años ahí no son ni siquiera minutos, y donde cada cigarrillo que existe es una vida de nuestro mundo. Y como aquí, hay diferentes marcas que indican como eres y diferentes tamaños e incluso formas y sabores que te dan un toque de "personalidad".
Y como lo hace un cigarro, la vida se consume con el tiempo. Salimos del interior de un lugar seguro a un exterior que no podemos manipular y desde que nacemos nos están quemando para que nos vayamos desgastando cada día más. Y mientras avanza la vida también mengua y se consume cada día más. Y cada calada de ese cigarro es uno de esos momentos en los que dices "ojalá no acabara nunca" pero que por alguna casualidad de la vida son los que más rápido nos pasan.. Y entre caladas y descansos la vida se consume día a día, poco a poco, hasta que llegamos al final y en ese momento el fuego que lleva quemándonos desde pequeños se apaga porque ya no tiene que quemar, porque ya ha acabado su labor de consumir otra vida.
Bueno, nada más por hoy, disfrutadlo y compartidlo. Seguid con vuestras cómodas vidas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario